El cuidado y observación de la ropa de trabajo es responsabilidad del profesional. Poseer conocimientos sobre las normativas de seguridad y de los beneficios de acatarlas ayuda a concientizar y prevenir accidentes laborales.

En términos generales, se debe llevar ceñida la indumentaria de trabajo evitando llevar partes sueltas de tela, o ropa rota, estas circunstancias motivan riesgos laborales. Es riesgoso llevar partes de tela que cuelguen de la indumentaria, ya que puede haber peligros de enganche y resbalamientos.

Según las distintas funciones a desempeñar no se permite guardar herramientas en bolsillos de la indumentaria, tampoco colgarlas de cinturones de seguridad, o prender en calzados especiales. Únicamente en aquellos casos que el diseño de la ropa lo requiera y tenga bolsillos diseñados para dicho fin, podrán llevarse herramientas en la indumentaria de trabajo.

Los peligros de accidentes y las probabilidades de heridas en los individuos aumentan cuando la ropa de trabajo es mal empleada. Siempre que se capten desgarros o anomalías de la fabricación se debe solicitar su reemplazo para seguridad del trabajador y del equipo que comparte tareas diarias. Saber los peligros de accidentes es esencial para prevenir e instaurar normas adecuadas.

Es importante señalar, que todos los elementos utilizados en el ámbito laboral deben responder en su construcción a normas de calidad. En la seguridad e higiene en el trabajo, hay que observar todas las posibilidades de riesgo, y las circunstancias donde el trabajador debe actuar con extrema responsabilidad.

El uso de la ropa de seguridad es muy importante para el bienestar del trabajador. Según la tarea que se lleve a cabo, el profesional debe usar distintos elementos de protección relacionados directamente con la seguridad laboral, guantes, gafas, mono de trabajo, calzado, cintos de seguridad, y ropa apropiada para cada labor a desempeñar.

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